lunes, 26 de abril de 2010

Quo vadis?


Estoy seguro de que Victorino lo sabe, sabe lo que ha hecho mal, pero no se si será demasiado tarde para rectificar. Este año no va a Madrid por vergüenza ganadera ó tal vez porque no quiere salir más devaluado de lo que ya está.

No hace tantos años, sus toros eran exigentes, daban y quitaban; ponían a cada cual en su sitio; tenían movilidad, emoción, casta y todo aquello que hoy, lastimosamente han perdido.

La corrida de ayer en Zaragoza fue un auténtico fiasco. Quien desee leer un análisis más pormenorizado que se pasee por el blog de mi vecino de tendido Luis Domínguez, mientras tanto yo, quiero seguir reflexionando sobre el ganado. El de Galapagar es un tío listo que durante años ha sabido estar por encima del bien y del mal ya que sus encierros se lo han permitido. Pero hoy en día ha llegado el momento de las curas de humildad, de deshacer lo andado y de sacrificar todo aquello que haya de sacrificarse para que los genes de Santa Coloma y Saltillo afloren nuevamente en la ganadería.

Ayer pudimos contemplar un compendio de todo aquello que repudia el respetable: desde toros blandos, a toros sosos, sin codicia alguna, aplomados, tardos, sin celo en el caballo... .

Hacia dónde va esta ganadería?. Qué buscan padre e hijo?. Tenían todos los ingredientes para seguir haciendo un buen guiso y los están desaprovechando. Supongo que ellos son los mayores interesados en que cambie esta desagradable tendencia. Sinceramente creo que ahora vuelven a tener un largo camino de vuelta por recorrer

1 comentario:

En Barrera dijo...

Esta claro que los “victorinos” no pasan por su mejor momento.
Espero que pronto vuelvan a salir por chiqueros toros, que estén a la altura de esta divisa histórica y que esta entre mis predilectas.