Lo cierto es que yo no he ido este fin de semana a Córdoba a ver flamencos ni flamencas, pero mira por donde resulta que en estos días estaba programado un evento que yo creo que está llamado a ser la cita mundial de los flamencos: La noche blanca. En todas las plazas de Córdoba, durante una noche hay actuaciones en directo de artistas de la talla de Raimundo Amador, Enrique Morente, Pitingo, o el Pele (qué grande). No es que sea yo muy palmero, pero ir de un sitio a otro, con el aliciente de pasear por callejuelas maravillosas que te transportan al mundo de sefarad y al de Abderramán, o de ver una actuación en el corazón de la misma Mezquita, acabó por contagiarme el embrujo que provocan las voces que suenan como lo hacen las almas rotas.
Por cierto, alguien sabe si hay alguna mujer fea en Córdoba?.
(A lo mejor fue el alcohol, pero yo no vi ninguna)
(A lo mejor fue el alcohol, pero yo no vi ninguna)
1 comentario:
Visto lo visto, mejor se dedicaba usted a realizar instantáneas que es lo que de verdad se le da bien y a beber menos, sinvergüenza.
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