domingo, 14 de abril de 2013

Me ha quedado claro

No estuve en Sevilla ayer, pero me sentí bien informado de lo que allí acontecía gracias a  Paco Aguado, del equipo de Onda toros, que no fue el que más habló, pero con diferencia fue el que más cosas dijo.
Hoy he leído las crónicas y he visto el resumen y más o menos tengo una idea meridiana de lo que se vivió en la encerrona. Alguien eligió mal el ganado y alguien no estuvo a la altura de las circunstancias sobre todo en un saltillo en el que se sabía que se  iban a centrar las miradas de los más exigentes y finalmente y como colofón, Sevilla es muy generosa, cosa de la cual me alegro porque no estamos para fiascos.
Mi conclusión es que admiro mucho a los toreros a los que un Victorino no les deja en evidencia y que para ser el primero de la clase, hay que estudiar mucho y ayer ya se vio desde los inicios en el saludo de capote a ese tercero, que alguien no se había preocupado demasiado de empollar esa lección.
Dicho esto, hoy tenemos en el coso maestrante a un sobresaliente de lujo, que a poquito que le permita Ventura, que seguro que lo hará, dejará un regusto de esos que ayudarán a que no sea la última vez que Sergio Domínguez pise el albero sevillano. Mucha suerte para él.



No hay comentarios: