martes, 20 de marzo de 2018

Juan José Villa "Villita"


A éste  lo tenía visto ya en el bolsín que con tanto cariño organiza mi amiga Vanessa Santos en los primeros días de cada año (estoy seguro de que éste ha sido un pequeño paréntesis). Villita ganó la edición de 2017 con solvencia y aplomo durante los tres días que lo pude ver.


Desde entonces hasta antes de ayer, progreso, mejoras y eso que muchos aficionados echamos tanto de menos: personalidades y toreo diferentes.



Quizá el pasado domingo no fue el más técnico de los tres, quizá no el más valiente, pero sin duda alguna, el de más "pellizco" , el más personal y el más atractivo de cara al futuro. Pone banderillas como los antiguos, se coloca, cita con suavidad y piensa delante de la cara de su oponente. ¿Podemos pedir más?, por supuesto que sí, pero no ahora, que vaya evolucionando y como le dije el domingo por la noche: que no abandone ese concepto tan suyo porque dejará de interesarnos.
Enhorabuena a este brillante ganador de la XVII edición del Zapato de Plata de la ciudad de Arnedo.


Las fotos de su toreo, que son lo mejor de esta entrada con mucha diferencia,  son del afamado cartelista (con L), pintor, poeta, rapsoda, ensayista, fotógrafo y unas cuantas cosas más, que atiende al nombre de Carmelo Bayo, que últimamente está de dulce y que no hará ningún asco a cualquier piropo que le lancéis si lo véis por la calle.

1 comentario:

Oscar Fernandez dijo...

I think he is very brave