Urdiales en Madrid

Que suene la música, pero no durante la lidia porque mañana nos vamos todos a Madrid. “todos” somos aquellos a quienes como dice Pablo, nos conmueve esto del toreo. Somos aquellos que creemos que Diego Urdiales torea, que pensamos que ya es hora de que Madrid y  esos toros tan “extraños” que este año están saliendo al ruedo, permitan a este torero dar el salto cuantitativo, que no cualitativo, que se merece.

No creo que le hagan falta los consejos de Luis Domínguez (Tauropiniones) para triunfar en Las Ventas. Con seguir teniendo la fé que tiene en si mismo y hacer lo que sabe, es suficiente. Bastará con dejar ver su capote, su maravilloso capote, con dirigir una lidia ordenada haciendo las cosas bien, sin pausa pero sin prisa, con empezar a torear sin probaturas, y si puede ser, sólo si puede ser, dando distancia y citando desde el centro del anillo, con sobriedad, con clasicismo, sin marketing, sin parafernalias y sin estridencias. Bastarán dos series de naturales secos, mandones y profundos, enganchando al toro desde el principio y terminando el pase atrás, donde cruje la cadera y la clavícula y será suficiente una estocada de esas de verdad, de las que suelen ser marca de la casa. Con eso, como bien dice un amigo, le cortará dos a un toro que sólo sea de una.

Ah, y aunque Juan Mora se lo pueda permitir (porque lleva muchos años de alternativa), me refiero a parlotear con el tendido mientras está toreando, tú, Diego, a lo tuyo, concentradito en la faena y a resolver el crucigrama del toro si sale con problemas, no como Manzanares ayer que demostró carencias. Y poniéndote como tú sabes, de verdad, sin tanta holgura y tanto aspaviento como el muchacho guapo, que para eso él se las pinta solo.

Que suene la música y que las notas del pentagrama sean de tu puño y letra, que seguro que nos gustan.

Suerte, mucha suerte torero.