lunes, 14 de marzo de 2011

Hablemos de Mora

Qué bueno es saber escuchar a quien te puede enseñar algo. Llevaba días meditando un post sobre Juan Mora. Pensaba escribir que siempre me ha parecido un buen torero (y esto lo mantengo). También pensaba exponer, que lo del sobrero del otro día en Vistalegre pudo ser un acierto o un error, pero que a la postre a mí me demostraba que después de lo de Madrid, el torero tenía ambición y que no pensaba vivir una temporada entera de las rentas, que tenía ganas y que saldría cada tarde como si acabase de empezar su trayectoria.

Después de una charla al respecto he cambiado de opinión, sencillamente porque lo que escuché me parece más acertado que lo que yo pensaba.

Mora se equivocó al pedir un sobrero en una tarde en la que ni de lejos podía hacer sombra a Morante. Madrid le premió en Otoño después de una temporada de más de lo mismo y le premió con razón, por ser diferente, por ser torero, por hacer faenas ajustadas a lo que requerían sus toros y porque Madrid, con toreros que no torean y que repentinamente “resurgen”, es Madrid.

Pero cada toro tiene una faena que no se puede volver a repetir ante otro astado de diferente condición como si de una función de teatro se tratase. Los muletazos de inicio del otro día fueron impecables, pero luego el torero se diluyó en esa irregularidad de la que ha hecho gala durante toda su trayectoria. No se puede torear “a ratos” y sobre todo, insisto, cada animal es diferente y no se le puede hacer una faena que intenta ser un clon de algo que ya sucedió.

Lo que no le niego en estos inicios de temporada, son ganas y eso ya es mucho, pero albergo mis dudas sobre su capacidad para habernos convencido allá por el mes de octubre. Sinceramente espero equivocarme.



1 comentario:

Enrique Martín dijo...

I.J. del Pino:
Coincido en que como él o alguien esperen repetir aquello caerán en el error. Se pueden reeditar triunfos, pero no faenas. Incluso con aquel mismo toro, la faena no podría ser igual. Y es verdad, siempre ha sido buen torero, con gusto, clase y torería, pero esa galvana que le venía de vez en cuando es la que no le permitió ser mucho más. Ójala quiera ser él mismo y ya está.
Me encanta eso de "es Madrid". Es verdad que a pesar de muchas cosas, Madrid es de las plazas más sensibles de todas y que cuando se da, se da toda. Así son los de mi pueblo y los que también lo son, aunque vivan en otras partes a muchos kilómetros. De Madrid es el que quiere.
Un saludo